Después de dos meses, volvemos a publicar algo.
Ahora tenemos casa nueva y cocina nueva, pelín más grande (o no), pero con un horno que estrenamos nosotros y ¡ojo! ¡cuatro fuegos!. Todo un lujo la nueva mansión Panda, vaya.
Pero antes de la mudanza, las cajas, los mil viajes de una casa a otra...y de saber dónde íbamos a vivir, preparamos una receta especial que iba a ser la número 100 del blog...y aquí está. La última receta cocinada en nuestro querido horno portátil...
Yo quería que las cupcakes me quedasen perfectas, estrenar las tacitas-molde con dignidad (¡gracias Sarita!)...pero no lo conseguí. La masa estaba riquísima y la cobertura también, pero el montaje no es lo mío, definitivamente. No voy a poner excusas y decir que el horno es enano, que en cada bandeja sólo cabían cuatro magdalenitas, que no tengo moldes de metal para hacerlas, que era la primera vez que tenía una manga pastelera en mi poder, que las magdalenas desarrollaron unas tetillas que no entiendo de dónde salieron... no quedaron perfectas y punto. Pero estaban ricas. Soy experta en magdalenas feas pero ricas, al parecer.
En fin, no me enrollo más, a la receta.
Ingredientes: (en tazas/cups)
Para las cupcakes:
3/4 tazas de azúcar
4 bolsas de té Earl Grey ó 2 cucharadas de té suelto y 1/2 taza de agua
1 taza y 3/4 de harina corriente
1 cucharadita y 1/2 de levadura química (tipo Royal)
1/2 cucharadita de bicarbonato
1/2 cucharadita de sal
2 huevos grandes
1/2 taza de aceite suave (oliva o girasol)
1 cucharada de extracto de vainilla
2/3 taza de leche (en teoría entera, pero yo usé desnatada)
Para la cobertura de nubes:
12 nubes (las mías eran chiquititas, si son más grandes, usa la mitad)
1 cucharada de mantequilla
1 cucharadita de té (la infusión)
1 cucharada de Earl Grey picado (opcional)
Preparación:
1. Prepara el té, calentando el agua y dejando infusionar durante unos 10 minutos. Debe quedar un té muy oscuro. Reserva.
2. Mezcla el aceite con el azúcar y la esencia de vainilla y añade los huevos de uno en uno. Añade además 4 cucharadas del té (líquido) y la leche.
3. Cuando estén bien mezclados, añade la harina, el bicarbonato, la sal, la levadura mezclados en dos tandas, sin dejar de remover.
4. Precalienta el horno a 175º. Llena unos moldes para magdalenas con la mezcla hasta aproximadamente la mitad de su capacidad y hornea durante unos 15 minutos.
5. Ahora prepararemos el frosting, cobertura...o como lo quieras llamar :)
En una cazuela o sartén anti-adherente, derrite la cucharada de mantequilla, añade las nubes y remueve hasta que se derritan por completo. Parece que no, pero descuida que lo hacen.
Cuando estén completamente derretidas, añade una cucharadita del té que hemos preparado antes y, si quieres, té picado muy fino.
6. Cuando las magdalenas y la cobertura estén bien frías, decora. Aquí mejor no doy consejos...porque no es lo mío :`)
Puedes usar otro tipo de té para la receta, prescindir de él (aunque quedará un poco sosete) o utilizar otro tipo de frosting, como el de queso que usamos aquí, lo importante es que disfrutes cocinando y comiendo ;)
PD: no, no pienso hacer ninguna broma con el uso de tazas en este post relacionadas con Annie Bottle. Ai am sorri :-P
No hay comentarios:
Publicar un comentario